lunes, 20 de febrero de 2017

Primero las damas

Un día normal en una familia normal, se prende la tele como de costumbre y las siguientes imágenes se ven reflejadas en la pantalla: mujer abusada mientras duerme perdona a su violador ya que este le ofrece una mejor vida. Sirvienta pobre y explotada logra salir adelante gracias a un hombre rico que se enamora de su belleza. Ama de casa encargada de siete hombres se salva tras ser envenenada por madrastra y ahora vive con amante que le ofrece protección. Joven abandona sus sueños, familia y costumbres por ir en busca de el amor de su vida que sólo ha visto una vez. Hermosa dama sale a defender al hombre que secuestró a ella y a su padre argumentando que ya no es el mismo de antes y que lo que importa es lo de adentro. La tele se apaga. Indiferentemente la familia continua su vida. Los hombres se van a trabajar, los jóvenes a estudiar y las mujeres continúan siendo lo que deben ser: “princesas”.

Por más que lo queramos ocultar, está es la realidad de la mujer hoy en día, inmersa en una gran cantidad de prejuicios que no le corresponden, los cuales tenemos tan inculcados desde niños que nos parecen algo natural. Se nos hace normal que una mujer sea utilizada como instrumento de publicidad, normal escuchar chiflidos cuando una mujer camina por la calle, normal ver en las noticias que hubo un feminicidio o violación a una mujer que estaba sola, normal juzgarla primero a ella por cómo andaba vestida y porque no estaba acompañada, normal que una mujer sea siempre la que se queda en casa y que necesite de un hombre para salir adelante, porque claro, ¿cómo le haría si no? Claramente no tiene las aptitudes necesarias, son muy débiles física y emocionalmente, necesitan protección. Y pensar que hasta se preocuparon por crear el feminismo, un movimiento horrible que solo busca poner a la mujer en la cima, defenderse de una sociedad según ellas patriarcal y destruir a todos los hombres (si aunque sea por un segundo consideraste que en verdad esto pretende el feminismo, por favor, busca ayuda).

El feminismo no busca que las mujeres sean superiores a los hombres, eso sería más bien hembrismo o sexismo, lo que busca es la equidad de género, que tanto hombres cómo mujeres tengan los mismos derechos y oportunidades. Desde su formalización en el siglo XVII, ha tenido varios logros que han marcado la historia y nos han llevado a formar el presente en el que vivimos hoy, donde la mujer tiene derecho al voto, tiene la oportunidad de estudiar la universidad y la posibilidad de elegir cualquier trabajo o profesión... y aun así hay gente que piensa que el feminismo no sirve para nada, que termina afectando más a la propia mujer que al hombre, confundiéndolo con un tipo de “machismo para las mujeres”, lo cuál refleja la ignorancia de la sociedad. Esto incluyendo a machistas y gente que se hace llamar feminista que en realidad esta muy lejos de serlo.

Para evitar este tipo de hipocresías debemos tener en cuenta algunos aspectos importantes, como que los hombres y las mujeres no somos iguales y nunca lo seremos. Muchas veces no se puede exigir lo mismo, ya que nuestra fisiología es distinta y sería injusto. También nuestra forma de pensar es diferente, por lo que nuestros gustos y preferencias varían. Habrá actividades que por naturaleza hombres prefieran más o menos que las mujeres y viceversa, pero no podemos olvidar que como individuos también somos distintos, por lo que los roles no deben ser asignados por tu género y mucho menos deben ser criticados. Así como una mujer debe tener derecho a ser profesionista, sin obstáculos extras sólo por ser mujer, también debe poder ser madre y ama de casa sin ser llamada sumisa. Ambos roles son vitales en la sociedad y tienen el mismo valor.

Mucha gente no tiene claro todo esto, conservan ideas de cómo “deben ser las cosas” cuando en realidad no hay nada escrito y definitivamente cambiar su forma de pensar es muy difícil ya que así fueron educados, pero es aquí donde se encuentra la solución. No nos tenemos que ir lejos para encontrar dónde se origina el problema, el principal lugar en que uno cultiva sus principios y valores es en casa con la educación que recibimos. La única forma de cambiar la visión de la sociedad es poniendo el ejemplo, para que futuras generaciones tengan un chip diferente en la cabeza, enseñando que es trabajo de todos mantener la casa en limpia, cómo también lo es estudiar y proponerse metas en la vida.

A fin de cuentas no importa la etiqueta que tengas o el bando al que apoyes, lo importante es saber quién eres y si tus acciones están contribuyendo a una sociedad mejor, más justa y equitativa para todos, dónde hombres y mujeres tengamos los mismos derechos y oportunidades.


Santiago Trozzo Diez
Alumno de 3º de preparatoria

lunes, 13 de febrero de 2017

La Educación

“La educación es un factor indispensable 
para que la humanidad pueda conseguir 
los ideales de paz, libertad y justicia social” 
Jacques Delors

La semana pasada celebramos el centenario de nuestra Constitución, la cual supuestamente nos ha estado protegiendo y guiando a lo largo de este tiempo, con cambios y mejoras que prometían un periodo de prosperidad en la estructura tanto económica, como social y política de nuestro país.

Ahora bien, México es un país con 217 años de independencia, se podría decir que es una nación relativamente joven; sin embargo nuestros vecinos “gringos” quienes viven en una de las principales potencias actuales, consiguieron su independencia tan solo 34 años antes y en esta pequeña diferencia de tiempo ya han mostrado una superioridad indudable. Hoy en día me cuestiono ¿cuál es el motivo de nuestro atraso? Si tenemos una población dispuesta a trabajar y los recursos para convertirnos en un país de primer mundo. La respuesta a ese lento progreso puede estar en la población, en específico sus hábitos, en la educación o en los partidos políticos que con cinismo han estado pasándose la presidencia y el poder como si fuera un título cualquiera. Cada uno de estos factores, aunque no son los únicos, nos han llevado a un rezago tecnológico que sumado a las adversidades del mercado y la economía internacional, dejan un panorama oscuro para el pueblo mexicano.

Pero hoy quiero centrarme en la educación, ya que es fundamental para el desarrollo de cualquier país. Los jóvenes que ahora se encuentran estudiando se convertirán en unos años en la fuerza laboral que sostendrá la economía de todo México, por lo que es muy importante tener un buen sistema educativo.

En el Artículo 3º de nuestra Constitución se menciona que todos los ciudadanos tienen derecho a recibir educación. El gobierno es el encargado de impartir el nivel básico con una educación “laica, obligatoria, gratuita y de calidad” aunque hoy en día se encuentra un gran número de escuelas religiosas que imparten educación y formación a los alumnos.

Sin embargo, aunque la Constitución nos otorga ese derecho, a los líderes políticos parece no importarles ya que México es el tercer país dentro de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE) con mayor número de jóvenes que no estudian ni trabajan (superado sólo por Turquía e Israel). En el reporte de 2011 la organización señaló que son 7 millones 248 mil 400 los mexicanos en esta situación. Además, entre los países de la OCDE ocupamos el último lugar en expectativa de graduación de bachillerato con sólo 47%. La Secretaría de Educación Pública está encargada del sistema educativo y recibe gran parte de los recursos financieros, que se mal utilizan
y se desvían como nos demostró la expresidenta sindical “Elba Esther Gordillo” quien ha sido fotografiada en repetidas ocasiones comprando en tiendas exclusivas de Polanco. El periódico Excélsior reportó uno de los momentos más sorprendentes, cuando apareció con artículos Louis Vouitton valuados en más de 50 mil pesos.

Entonces, ¿cómo podemos cambiar?

Para llevar a cabo un cambio y prosperar en el ámbito educativo, tenemos que deshacernos de todos los que están en los altos puestos y poner a personas realmente preparadas, que en verdad puedan demostrar que están dispuestas a realizar su labor con honestidad. Un ejemplo claro es José Pedro Kumamoto Aguilar, diputado independiente del distrito 10 del Estado de Jalisco, quien con una serie de propuestas y poniendo su dedicación y preparación está logrando un cambio positivo en la política mexicana.

En la educación lo mejor sería que se elija gente destacada dentro del mismo ámbito educativo para éstos cargos; suena difícil, ya que el dinero suele cambiar mucho las ideologías, aunque no perdemos la esperanza que haya alguien que quiera realizar como es debida su labor. Otra forma de impulsar la educación mexicana, es una remodelación en la estructura que se ha estado llevando a cabo por décadas, o valorando y analizando los nuevos sistemas, como es caso del famoso “Modelo Educativo para la Formación Integral” (MEFI), para así crear uno que se adapte a las necesidades y nos genere industrialización y progreso.

Según el nuevo plan de desarrollo institucional de la UADY para la Educación Media Superior, la intención de este nuevo modelo educativo es preparar a los estudiantes para emprender su labor en una época de globalización; sin embargo también se menciona la necesidad que tienen las grandes compañías en la contratación de los egresados, en vez de guiarlos a la creación de empresas que fomenten el desarrollo económico de la nación, aquí pudiera existir una doble intención.
Además, los maestros deben ser evaluados de manera constante y solicitados a tomar cursos para estar siempre a la vanguardia ya sea en los métodos de enseñanza, como en la información que transmiten a las futuras generaciones.

Estamos en un periodo de cambio, donde la gente no está de acuerdo por completo con las decisiones del gobierno; por lo que es hora de mostrar propuestas para generar un mejor sistema educativo que a posterior nos lleve a una época de prosperidad y estabilidad, con jóvenes educados y preparados que demuestren en verdad de que estamos hechos los mexicanos.


Enrique Martínez Barroso
Alumno de 3º de preparatoria