Sin embargo, el uso de ésta tecnología no siempre es adecuado. Muchos científicos han llegado a la conclusión de que los usuarios más activos en las redes sociales tienen más problemas de autoestima que los moderados, ya que los jóvenes clasifican socialmente o juzgan a los demás con mayor facilidad de manera virtual que en persona. Estudios recientes establecen que jóvenes que pasan más de tres horas al día en alguna red social, tiene 110% más probabilidad de sufrir acoso cibernético. Solamente en Estados Unidos la Organización Fight Crime (Lucha contra el delito) reveló de manera reciente que uno de cada tres adolescentes y uno de cada 6 preadolescentes habían sido víctimas del acoso escolar cibernético; en México la situación no es diferente.
En muchos casos los adolescentes que hacemos uso de esta tecnología, nos volvemos esclavos de una vida virtual, que nos atrapa y nos conecta muchas horas del día, ya sea a través de tu perfil de consola de videojuegos, en la televisión, y sobre todo en las redes sociales que pareciera que se han convertido “vitales” en nuestro estilo de vida.
Otra gran desventaja de las redes sociales es que algunos usuarios crean una imagen sesgada de ellos mismos ya que es muy habitual y bastante sencillo mentir o aparentar algo que no eres, o dar una proyección de ti falsa. Muchos adolescentes publican cosas que no son, con tal de dar una imagen perfecta y sentirse aprobado o aprobada por los demás.
Algo que también nos debe preocupar es que los medios de comunicación en nuestro país (los cuáles muchas veces nos llegan a través de las redes sociales) nunca nos informan del todo bien, nos esconden cosas; he llegado a la conclusión de que los medios lo controlan todo, estando presentes en tu vida diaria. Esto me recuerda una opinión que leí acerca de la serie Black Mirror “En cada hogar, en cada escritorio, en cada palma, una pantalla de plasma como un monitor, un Smartphone, un espejo negro, es el mejor testigo de nuestra existencia del siglo XXI”, y es precisamente a través de éste “espejo negro”, por el cual leemos y observamos el mundo que nos rodea.
Hay que tener en cuenta que el internet está lleno de información, pero hay que saber distinguir que no todo es verídico ni dar todo por cierto todo lo que vemos publicado. ¿A cuántos de ustedes no les ha pasado que comparten algún artículo o noticia para luego enterarnos de que no es verdad? ¿cómo distinguir una fuente confiable de una que no lo es?, ya que generalmente creemos todo lo que leemos en las redes sociales que más frecuentamos.
Sin embargo, las redes sociales también tienen sus ventajas; a todos nosotros nos ha ocurrido que por motivos personales o elección de proyectos de vida nos distanciamos de personas que estimamos y en el momento menos esperado recibimos una solicitud de amistad que nos permite ponernos al corriente de nuestras vidas, esto solo por mencionar una de las cosas positivas que podemos obtener de ellas.
Opino que el uso a los aparatos electrónicos debe ser más moderado, ya que te convierte en una persona menos creativa y prácticamente genera adicción ya que muchas veces estamos más pendientes de nuestros dispositivos electrónicos que de las personas que están a nuestro alrededor.
Para concluir, cabe recalcar que es improbable que obtengamos los conocimientos por auto experiencia, sino es a través de fuentes de los medios que utilizamos. Esta información puede llegar a ser muy útil dándole un uso apropiado y moderado.
Entonces… el tiempo que pasas frente a tus aparatos electrónicos ¿es tiempo perdido o aprovechado?
Daniel Carrillo Ancona
Alumno de 3° de Preparatoria